originalmente publicado en El Post: http://elpost.cl/content/%C2%BFy-d%C3%B3nde-est%C3%A1-el-piloto
Desde la Guerra del Golfo, se ha ido imponiendo un nuevo Frente de Guerra.
Después de la tierra, el mar y el aire, el Cuarto Frente, el Frente de
la Información de Paul Virilio, ha tomado un rol central en el
desarrollo de los conflictos. En un mundo globalizado, donde todo es
aquí y ahora gracias a las telecomunicaciones, el control de la
Información, de la Imagen, que aparece en las pantallas se vuelve clave
para las estrategias militares.
El 4 de diciembre de 2011 ocurrió un hecho fundamental, revolucionario,
para entender los cambios a los cuales se están enfrentando los
paradigmas de la Guerra. Un drone, avión no tripulado
norteamericano, fue capturado en territorio iraní. En un primer momento,
Estados Unidos negó tajantemente la información argumentando la
imposibilidad de que tal acción fuese realizada por un país con una
tecnología militar atrasada. Como dijo un oficial norteamericano a Defense News,
sería como “dejar un Ferrari en una cultura con la tecnología del carro
de bueyes”. Al no poder negar la realidad por más tiempo, la OTAN
declaró que era un avión de reconocimiento, usado en las misiones en
Afganistán, del cual se había perdido el contacto y que seguramente
había realizado un aterrizaje forzoso.
Finalmente el Pentágono y la OTAN informaron que se trataba de un drone
RQ-170 de última generación, que no pertenecía al ejército
norteamericano sino que se trataba de un avión espía de la CIA. En la
noche del 7 de diciembre se mostró en la televisión iraní imágenes del
avión guardado en un hangar en buenas condiciones, descartando las
versiones de que hubiese sido derribado por un misil o estrellado en el
suelo.
Frente a estos hechos, podríamos pensar que el análisis principal
debería basarse en términos geopolíticos. Hablar de las consecuencias de
que aviones norteamericanos sobrevuelen un país enemigo, sobre todo en
un contexto de pre-guerra, más aun sabiendo que el avión era un avión
espía, por lo que su función principal es reunir información necesaria
para la creación de estrategias militares.
También podríamos plantear un análisis desde el conflicto creciente
entre Rusia y Estados Unidos en la región, sobre todo después de la
derrota de un aliado como Kadafi en Libia y el interés de la OTAN de
intervenir en Siria, país en el cual se sitúa la única base marítima de
Rusia en el Mediterráneo.
Otro punto en el cual podríamos enfocar nuestro análisis es la capacidad
de un país atrasado tecnológicamente de obtener una victoria frente la
primera potencia militar mundial. Sin duda los balances geopolíticos han
sido modificados por la captura del RQ-170, incluso si lo redujéramos a
la capacidad de poder estudiar un avión de ultima generación
norteamericano, descubriendo sus características secretas como por
ejemplo las aleaciones de metales usados, y de compartir dicha
información con Rusia y China, dispuestos a realizar acuerdos a niveles
económicos, políticos y militares para tener acceso al avión. Pero la
captura del drone es un punto decisivo para poder entender los cambios
profundos que están afectando los conflictos armados, donde el enfoque
se traslada de la tenencia de armas de destrucción convencionales a
tener armas comunicacionales más aptas a este Cuarto Frente donde la
Guerra es Electrónica (sistemas radares), Satelital y Cibernética.
Irán habría estado por segunda vez en el centro del desarrollo de la
guerra cibernética. En 2010, el ataque del virus Stuxnet logro destruir
1000 centrifugas de instalaciones nucleares, demostrando que los ataques
virtuales tienen la capacidad destructiva de los misiles. Ahora en
2011, habrían tomado el control de un avión no tripulado dándole la
orden de aterrizar en una base iraní. Lo que significaría que en la
guerra moderna, donde las armas son controladas a distancia, el dueño
del arma puede ser suplantado, entregando todo su poder destructivo a un
nuevo propietario.
La operación iraní se habría realizado en tres etapas, cada una con un
alto nivel de dificultad, pero es avalada indirectamente por los
expertos norteamericanos que, lejos de negar la posibilidad de dicha
acción, solo dudan de la capacidad iraní de realizarla. Por eso algunos
expertos piensan que Irán fue apoyado en su ataque cibernético por Rusia
o China.
El primer paso fue detectar el drone, hecho que es en sí una victoria
iraní pues los sistemas de radar iraníes no deberían ser capaces de
detectar un avión furtivo de última generación. El segundo, fue
interferir las comunicaciones con el sistema satelital GPS para que el
avión cambiara al sistema de piloto automático. El último paso consistió
en ingresar en el sistema computacional del drone, a través de un
ataque informático, los datos de una base iraní para que el avión
aterrizara automáticamente. Si este fue el procedimiento realizado,
entonces Irán ha tenido una victoria crucial frente a Estados Unidos
logrando vencerlos en la Guerra Electrónica, Satelital y Cibernética,
los tres aspectos fundamentales para entender la Guerra del Cuarto
Frente.
En la Guerra del Cuarto Frente las relaciones de poder ya no se basan en
la cantidad de armamento convencional sino en la capacidad de los
ejércitos en el control de la Información. Esta superioridad de la
Imagen sobre la Realidad va debilitando el concepto de propiedad. En la
Guerra Moderna donde gran parte del armamento de última generación es
dirigido a distancia gracias a los sistemas satelitales (como GPS), la
propiedad sobre el armamento se basa únicamente en una señal radio
transmitida instantáneamente de un punto al otro del planeta. Con el
desarrollo de la guerra cibernética sabemos que los sistemas
informáticos pueden ser secuestrados y ser usado a favor de sus nuevos
“dueños”. Por lo tanto, si el secuestro del RQ-170 fue realmente un
ataque de hackers entonces podemos decir que las armas de última
generación ya no tienen dueño permanente, solo propietarios efímeros
mientras ningún otro grupo logre hacerse con su control. Nos vemos
enfrentados por lo tanto a un vuelco revolucionario, a partir de ahora
la construcción de armamentos será puesta a disposición de cualquier
ejército del mundo. Debemos plantearnos la posibilidad de que un país
inferior militarmente en armas convencionales, como Irán o Corea del
Norte, pero con un alto desarrollo en las armas de la guerra cibernética
pueda tomar el control no solo de un avión drone espía de otro país
sino de un misil de ultima generación y, por qué no, de un misil
nuclear.
concuerdo totalmente en que la informacion es un arma muy importante por estos tiempos, tanto en el control de armas satelitales, como en el caso del drone; y tambien en el caso de los medios de (des)informacion masivos.. los medios pueden hacer que se vea limpio un asunto que en realidad es muy turbio y sucio. Eso de que el control de las armas ahora es efimero me recuerda un juego de pc (age of empires) donde los soldados y armas enemigos podian pasar a tu bando cuando un monje los conviertia a tu religion... es basicamente lo mismo.. saludos y gracias por tus analisis, son muy buenos
ResponderEliminarmiced
Muy buena analogía con Age of Empires, es exactamente lo que puede suceder en la Guerra Cibernetica, tomar el control del armamento enemigo.
EliminarLo interesante con la Guerra de la Informacion es que todo se basa en el engaño, en transformar informacion falsa en realidad. No solamente sucede en la guerra tambien pasa con los medios de comunicaciones y con los mercado financieros.